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Virus de Marburgo y enfermedad de Marburgo
En julio de 2022 se registraron dos nuevos casos de infección por el virus de Marburgo en Ghana. Según la OMS, el riesgo de propagación de la enfermedad es alto a nivel nacional, pero bajo a nivel mundial. Sin embargo, existe la posibilidad de que este virus aparezca en otras zonas del mundo debido al aumento de los viajes alrededor de África Occidental. ¿Cómo podemos contraer este virus y cómo podemos detectarlo en nosotros mismos? Lo descubriremos a continuación en el artículo.
¿Qué es el virus de Marburgo?
El virus de Marburgo pertenece a la familia de los filovirus. Es un virus ARN. Es un virus zoonótico, por lo que las personas pueden infectarse a través del contacto con animales. Es similar en estructura y acción al virus Ébola. Su reservorio natural es el murciélago frugívoro africano. Se descubrió por primera vez en 1967, cuando se desarrolló una epidemia en Marburgo y Frankfurt (Alemania) y Belgrado (Serbia). La causa del brote fue el contacto con animales de laboratorio infectados por el virus. La incubación del virus suele durar de 2 a 21 días.
Enfermedad de Marburgo
Es una enfermedad vírica rara que provoca graves riesgos para el organismo, como fiebre hemorrágica. Se desconoce el mecanismo de transmisión animal de este virus, pero la vía de infección más común es el contacto con las heces o los olores producidos por los murciélagos. La siguiente vía de transmisión es el contacto humano. El virus puede contraerse por contacto con sangre u otras secreciones corporales, objetos contaminados con fluidos corporales de la persona enferma y contacto sexual con ésta. Muchos brotes han comenzado con mineros infectados que trabajaban en minas donde se habían instalado murciélagos.
Síntomas de la enfermedad:
Aproximadamente 21 días después de la infección, comienzan a aparecer los primeros síntomas de la enfermedad, que incluyen:
- Fiebre
- Escalofríos
- Dolor de cabeza
- Dolor muscular
Transcurridos otros cinco días, aparecen otros síntomas
- Vómitos
- Náuseas
- Dolor torácico
- Dolor de garganta
- Dolor abdominal
- Diarrea
Los síntomas más graves de la enfermedad son
- Ictericia
- Pancreatitis
- Pérdida grave de peso
- Delirio
- Shock
- Insuficiencia hepática
- Hemorragia masiva y disfunción multiorgánica
Detección y diagnóstico
Desgraciadamente, hasta la fecha no se ha desarrollado ninguna vacuna contra el virus de Marburgo. La enfermedad tiene una tasa de mortalidad de entre el 23% y el 90%. El diagnóstico en sí es difícil, ya que muchos de los síntomas mencionados anteriormente también aparecen con otras enfermedades infecciosas como la malaria. Si un paciente presenta síntomas de la enfermedad y ha estado expuesto al virus, hay que aislarlo y tomar muestras para realizar pruebas que demuestren la presencia del virus. El virus suele detectarse mediante ELISA y PCR. También se puede aislar el virus, aunque debe hacerse en laboratorios seguros.
Tratamiento y prevención
Por el momento, no existe un tratamiento específico para la enfermedad. Actualmente se están realizando estudios en animales para obtener un tratamiento. Lo más importante en la actualidad es la prevención contra este virus. Las medidas preventivas incluyen: aislamiento de la persona potencialmente enferma, ropa de protección adecuada al entrar en contacto con la persona enferma, uso de instrumental médico estéril.